LLos expertos identifican ya muchas características que por repetirse, terminan perjudicando a la pareja.
Las soluciones propuestos son varias:
Decidir cuánto aportará cada uno para financiar la vida en común es un reto.
⚖️Muchos abogan por la idea del “50/50” o “mitad y mitad”, pero el problema se presenta cuando los ingresos son muy dispares.
A cada pareja le funciona una fórmula distinta, pero otra idea que es recomendable, es que el aporte a los gastos comunes sea proporcional a los ingresos que cada uno tiene
📌Desde esa perspectiva, dividir todo por la mitad podría perjudicar al que tiene unos ingresos menores.
💡Llevar a la práctica la fórmula del aporte proporcional no es tan complejo, pero hay que organizar las cuentas para calcular el porcentaje que cada uno debería aportar al fondo común.
Ese porcentaje puede ser calculado para cada gasto, o aún más fácil, repartir qué cuentas pagará cada uno, siguiendo el principio de la proporcionalidad.
🏦Uno de los grandes temas que cruza la decisión sobre qué hacer con las cuentas bancarias es el concepto de autonomía.
✅La fórmula que recomiendan muchos asesores financieros es tener una cuenta bancaria conjunta donde cada uno aporte el dinero suficiente para pagar todo los gastos comunes. Y en paralelo, cada uno mantiene su propia cuenta bancaria, protegiendo su independencia financiera.
Esta info surge del diario @bbcmundo y espero que te haya sido util.
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